El diseño del logotipo promociona a la región de Arequipa dentro y fuera del Perú en los campos del turismo y la producción. Para ello se creó un nuevo acento, que busca denotar el hablar “cantado” arequipeño que connota el carácter sincero, relajado y pasional de sus habitantes, además del fuego de sus volcanes, la gastronomía y la inteligencia de su gente. La expresión gráfica se inspira en el tallado barroco-mestizo arequipeño que representa icónicamente los principales elementos emblemáticos de la región, cuyo color rojo es resultado de la fusión de cuatro tonos de materias típicas del lugar: la chicha, bebida típica inca, la bandera arequipeña española, el ají de su cocina tradicional y el rocoto, picante como el carácter arequipeño, agente de cambio y orgullo permanente de sus pobladores.