En 1983 se estrenó la obra emblemática "Rosas Danst Rosas" que, desde entonces, se ha emulado en la danza posmoderna: cuatro bailarinas ponen a prueba su resistencia al bailar la misma pieza con diferentes códigos y velocidades, una y otra vez, hasta llegar a un paroxismo de danza sin control. El título "Rosas Danst Rosas" significa que se bailan a si mismas y, por ende, la repetición forma parte de su esencia. La fusión exquisita de Wassily Kandinsky, artista abstracto, con "Rosas" produce la creación de estas piezas de moda con elementos repetitivos que escapan de lo geométrico, usando el cuerpo como espiga artística. Brillante y a la vez tediosa, la obra es una exploración fascinante de sincronización, deconstrucción, patronaje y ritmo, junto con un paradójico "minimalismo dramático".