Este colectivo argentino desarrolla desde 2007 su propio método de trabajo, Guiso Gráfico, por medio del cual la obra engloba en una sola composición las visiones de cada uno sus cinco integrantes, trascendiendo la expresión individual para lograr una colectiva.
A través de su método de trabajo aborda temas sobre historia y realidad social y cultural, realizando piezas de diferentes formatos -murales, objetos y carteles- que, en muchas ocasiones, son impresos en serigrafía.
El grupo a la vez comparte su método de trabajo por medio del dictado de talleres en universidades, escuelas, hospitales o cárceles como herramienta de producción para estimular la participación individual y lograr la construcción de la imagen colectiva, provocando así la visibilidad del pensamiento de la comunidad.